domingo, 28 de diciembre de 2025

Dead of Night (1945)

Es una antología británica de horror producida por Ealing Studios, un estudio conocido principalmente por sus comedias, pero que aquí incursiona en el género sobrenatural poco después del fin de la Segunda Guerra Mundial. La película fue dirigida por cuatro realizadores: Basil Dearden (responsable del marco narrativo y el segmento "The Hearse Driver"), Alberto Cavalcanti ("The Christmas Party" y "The Ventriloquist's Dummy"), Charles Crichton ("The Golfing Story") y Robert Hamer ("The Haunted Mirror"). El guion fue escrito por John V. Baines, Angus MacPhail y T.E.B. Clarke, basado en relatos originales de H.G. Wells, E.F. Benson, John Baines y Angus MacPhail.

Género: Horror antológico, drama psicológico con elementos fantásticos.

Elenco principal: Mervyn Johns (Walter Craig), Frederick Valk (Dr. Van Straaten), Michael Redgrave (Maxwell Frere en "The Ventriloquist's Dummy"), Googie Withers (Joan Cortland en "The Haunted Mirror"), Sally Ann Howes (Sally O'Hara en "The Christmas Party"), Antony Baird (Hugh Grainger en "The Hearse Driver"), Basil Radford y Naunton Wayne (como golfistas en "The Golfing Story"), junto con actores secundarios como Roland Culver (Eliot Foley), Mary Merrall (Mrs. Foley), Esme Percy (antiquario) y Peggy Bryan (Mary Lee). La película no recibió premios mayores en su estreno, pero ha sido nominada retrospectivamente en listas como las del American Film Institute (AFI) y reconocida por su influencia en el cine de horror.

Dead of Night emerge en el panorama cinematográfico británico como una anomalía postbélica, estrenada el 5 de septiembre de 1945 en Londres, apenas una semana después del fin de la Segunda Guerra Mundial. Producida por Ealing Studios bajo Michael Balcon, el film desafió las restricciones gubernamentales que habían prohibido el horror durante la guerra para evitar alarmar a la población, con escenarios previos como The Anatomist rechazados por la BBFC. Su estructura antológica, con un marco narrativo que une cinco cuentos sobrenaturales, fue innovadora y estableció el subgénero "portmanteau", influyendo en obras como Tales from the Crypt (1972), Creepshow (1982) y episodios de The Twilight Zone.

La producción involucró a once escritores y cuatro directores, un esfuerzo colaborativo inusual que resultó cohesivo gracias al marco: el arquitecto Walter Craig llega a Pilgrim's Farm para remodelar una casa, solo para experimentar déjà vu al reconocer a los invitados de sus pesadillas recurrentes. Invitados por el dueño Eliot Foley, los huéspedes —incluyendo al escéptico psiquiatra Dr. Van Straaten— comparten historias sobrenaturales para explicar el fenómeno.


Desde el punto de vista técnico, Dead of Night destaca por su cinematografía en blanco y negro, a cargo de Douglas Slocombe y Stan Pavey, que utiliza sombras expresionistas y ángulos distorsionados para evocar una atmósfera de inquietud psicológica, influenciada por el expresionismo alemán como en The Cabinet of Dr. Caligari (1919).

El guion es ingenioso en su estructura, donde cada historia explora temas de lo sobrenatural a través de objetos cotidianos (un espejo, un muñeco de ventrílocuo), enfatizando el horror psicológico sobre el gore, lo que la distingue de producciones posteriores como las de Hammer. En particular, el segmento "The Ventriloquist's Dummy" destaca por el uso de close-ups en el rostro de Michael Redgrave, capturando su disociación mental, y el diseño del muñeco Hugo, que se convierte en un personaje autónomo a través de animación sencilla y voz superpuesta.

La crítica especializada ha elogiado Dead of Night como una obra seminal del horror británico. 

Martin Scorsese la incluye en sus 11 películas de horror más aterradoras, afirmando que sus cuentos convergen en la locura y se infiltran en la piel del espectador.

viernes, 26 de diciembre de 2025

La Ballena Alegre en el café Lion: De Tertulia Literaria falangista y comunista a "Club de los Platillos Volantes" (1950–1960)

La tertulia ufológica de Fernando Sesma (1950–1960) en la «Ballena Alegre».

Hay lugares que no solo guardan memoria: la producen. En Madrid, el sótano del Café Lion, conocido como «La Ballena Alegre», fue durante años sinónimo de tertulia cultural u política, conversación y fermento cultural. Pero su historia no terminó en la mitología de los cafés literarios o de la bohemia política: el mismo espacio acogió, con naturalidad casi desconcertante, reuniones sobre fenómenos paranormales y objetos volantes no identificados. 

Fernando Sesma. Agenteprovocador.es

Fernando Sesma, funcionario y animador incansable, articuló una comunidad de «contactados» y curiosos que discutían mensajes de supuestos visitantes del espacio y, sin pretenderlo, prepararon el escenario de uno de los mitos contemporáneos españoles más resistentes: el «affaire Ummo».

El fenómeno Ummo representa uno de los casos ufológicos más complejos y debatidos en la historia de España, centrado en Madrid durante las décadas de 1950 y 1960. El caso se originó en el círculo de Fernando Sesma y su tertulia "Amigos de Visitantes del Espacio", quienes comenzaron a recibir una vasta cantidad de documentación y comunicaciones telefónicas de supuestos seres del planeta Ummo, situado a 14 años luz de la Tierra. Estos mensajes, de alto contenido técnico y científico, describían una civilización avanzada y se diferenciaban de otros contactos de la época por su ausencia de un tono mesiánico.

La evidencia del caso se consolidó con dos eventos clave: el supuesto aterrizaje de un OVNI en el barrio de Aluche en 1966, que dejó tres huellas físicas como prueba, y el avistamiento y fotografía de otro objeto con el símbolo de Ummo en San José de Valderas en 1967. Este último evento produjo artefactos metálicos que, tras un análisis oficial, revelaron una composición química inusual para la época, como una pureza de níquel del 99%.

A pesar de la aparente solidez de las pruebas, el caso se vio envuelto en controversia. Las famosas fotografías fueron desacreditadas por algunos analistas como una maqueta, aunque otros defendieron su autenticidad. Finalmente, décadas después, José Luis Jordán Peña, una figura central dentro del grupo de entusiastas, confesó ser el autor intelectual de todo el montaje. Sin embargo, persisten dudas significativas sobre si una sola persona podría haber orquestado un fraude de tal magnitud y complejidad técnica. El caso Ummo sigue siendo un objeto de estudio por su impacto sociológico y las preguntas que deja sin resolver, con opiniones que oscilan entre el fraude absoluto, un experimento sociológico o la existencia de un núcleo de verdad contaminado.


1. España mira al cielo: OVNIs, carrera espacial y cultura popular

El fenómeno OVNI nace en el ecosistema mediático del mundo de posguerra y se consolida en el clima mental de la Guerra Fría. En España también, la cultura popular —prensa, colecciones de ciencia ficción, relatos de misterio— se convierte en un canal privilegiado. El auge de la ciencia ficción y la difusión de «lo fantástico» acompañan el crecimiento del imaginario ovni, especialmente cuando la carrera espacial se instala en el horizonte colectivo.

"Los OVNIs, en la España de los 50–60, funcionan como imaginario de modernidad: hablan del futuro."

Esta convergencia es decisiva: la ufología no se explica solo por «avistamientos», sino por un lenguaje disponible para interpretarlos (términos, marcos, expectativas). A partir de finales de los sesenta la prensa empieza a preferir «OVNI» a «platillo volante», no es solo un cambio semántico.

El epicentro del fenómeno fue Fernando Sesma, un empleado de Telefónica que desarrolló un gran interés por los "platillos volantes". Sesma fundó una tertulia que evolucionó hasta convertirse en la "Sociedad de Amigos de Visitantes del Espacio", la primera entidad de este tipo legalizada en España. A partir de 1956, el grupo se reunía en el sótano del Café Lion, conocido como "La Ballena Alegre", que se convirtió en el punto neurálgico del caso durante más de veinte años.

El Precedente: El Caso de Alberto San Martín

Un suceso clave que avivó el interés del grupo ocurrió en noviembre de 1954. Un enfermero llamado Alberto San Martín afirmó haberse encontrado con el tripulante de un platillo volante cerca de la carretera de La Coruña. Según San Martín, el ser le entregó una piedra de forma cúbica con nueve signos grabados en una de sus caras.

Fue el primer evento de este tipo en España y tuvo un enorme impacto, interpretándose como un mensaje mesiánico de extraterrestres a la humanidad. El profesor Pedro García Ballón Campomanes, del Instituto Madrileño de Mineralogía, analizó el objeto y declaró que "aquella piedra era rarísima y daba reacciones muy extrañas". Para Sesma y su grupo, esta fue la primera evidencia tangible de un contacto extraterrestre.


2. Fernando Sesma y el método BURU: creer antes que demostrar

En ese contexto aparece Fernando Sesma. Relanza su actividad en 1957 y el núcleo de reuniones se desplaza al Café Lion, bajo la enseña de una sociedad llamada BURU (Sociedad de Amigos de los Visitantes del Espacio).

Más que una asociación formal, BURU funciona como una gramática de grupo: un modo de reunirse, escuchar, comentar y reforzar la creencia. El lema que se atribuye al entorno de Sesma lo resume con precisión sociológica: «creérselo todo mientras no se demuestre lo contrario».

La frase desplaza la carga de la prueba y convierte la reunión en una «fábrica de plausibilidad». En términos de comunicación, BURU no es solo un grupo que consume relatos: es una comunidad que los produce mediante repetición, autoridad informal, expectativa compartida y un espacio estable (la tertulia) donde el rumor se vuelve experiencia.

El punto de inflexión llega en 1966 con el inicio del «affaire Ummo»: una llamada telefónica a Sesma —una voz que afirma proceder de un planeta llamado Ummo— y el anuncio de que llegarían confirmaciones por correo. Poco después aparecen fotografías y, a continuación, cartas redactadas con estilo sobrio, que se presentan como procedentes de Ummo, planeta que orbita la estrella «IUMMA», identificada en la nomenclatura terrestre como Wolf 424.

Ummo se construye como un mito documental. La carta mecanografiada, el encabezado (UMMOAELEWE), el sello con signo, el tono técnico: todo ello produce una estética de credibilidad. La tertulia, además, funciona como canal de distribución y amplificación: Sesma leía «cada martes» la última carta recibida en la reunión.

Los mensajes abarcaban una amplia gama de disciplinas, describiendo la historia política, social, religiosa y lingüística de la civilización ummita. Detallaban conceptos avanzados de cosmología, astronomía, medicina y biogenética, temas poco comunes en la época. Describían un sistema de transporte basado en "anillos toroidales" y otros avances desconocidos en la Tierra.

A diferencia de otros casos de contactados, los ummitas no transmitían un mensaje mesiánico o salvador. Su objetivo declarado era "mejorar nuestra vida" aportando conocimiento, lo que contribuyó a su credibilidad y repercusión.


3. Del «caso» a la constelación: Valderas, Aluche y la ingeniería de verosimilitud

El ecosistema Ummo no se limita a cartas, episodios como Aluche o el «cuasiaterrizaje» de San José de Valderas pudieron operar como montajes destinados a dar difusión pública y reforzar la verosimilitud del relato.

Presuntos OVNIS en Alcorcón
Óscar Rey Brea habría cuestionado incoherencias y, más tarde, desmontado aspectos del caso Valderas, apuntando a la posibilidad de maqueta; además menciona análisis posteriores (Poher; Spaulding) que confirmarían la naturaleza fraudulenta de las fotografías.

Ummo no es un «bulo» aislado: cartas, llamadas, fotografías, relatos de testigos, discusiones en tertulia, circulación de copias y reinterpretaciones sucesivas. En términos contemporáneos, un sistema capaz de sobrevivir a su propia refutación porque su verdad no reside en un dato, sino en una comunidad.

¿Por qué funcionó?: El grupo de asistentes a la tertulia se «blindó». La tertulia semanal, el texto leído en voz alta, la autoridad de Sesma, el círculo que valida, la repetición que estabiliza. Ummo además prosperó porque La «Ballena Alegre» proveyó lo que cualquier mito necesita: un lugar, un calendario, una audiencia y un rito de transmisión.


Los seguidores del caso necesitaban una prueba física, y esta llegó con el supuesto aterrizaje en el barrio madrileño de Aluche. La agencia de noticias Cifra informó que varios testigos vieron un platillo volante con el símbolo de Ummo en su "panza".
Un testigo, identificado como el señor Jordán, afirmó haber visto cómo un objeto de color anaranjado y forma "vagamente triangular" descendió y aterrizó a corta distancia. En el lugar del supuesto aterrizaje se encontraron tres huellas profundas, rectangulares y con una especie de aspas en su interior, formando un gran triángulo y separadas por aproximadamente 6 metros. Esto fue considerado la "prueba definitiva" del aterrizaje.
Un año más tarde (1 de junio de 1967), se produjo el que es posiblemente el evento más icónico del caso. Un objeto volador fue fotografiado sobre los castillos de San José de Valderas (Alcorcón). Las imágenes mostraban un platillo volante en cuya parte inferior era claramente visible el símbolo de Ummo (similar a la letra H con una barra transversal adicional). Estas fotografías se convirtieron en una referencia mundial en el fenómeno OVNI. En el lugar donde el objeto se posó, cerca del restaurante "La Ponderosa", se encontraron unos cilindros metálicos. En su interior contenían un líquido y unas laminillas de plástico con el símbolo de Ummo grabado.


4. La Hipótesis del Fraude: José Luis Jordán Peña

Con el paso del tiempo, las comunicaciones disminuyeron y las sospechas sobre la autenticidad del caso crecieron, apuntando a una figura central: José Luis Jordán Peña.

Imagen: factorelblog.com

Era un participante activo en las tertulias ufológicas de Madrid. Empezó a levantar sospechas porque "parecía tener siempre más información" y acceso a conocimientos científicos de primera mano, que luego hacía pasar por comunicaciones ummitas.

Tras casi 20 años de sospechas, Jordán Peña finalmente confesó haber sido el autor de todo el fenómeno Ummo. Según los testimonios, "se nos desmontó totalmente el caso y luego al final terminó reconociendo que efectivamente él había sido el autor de toda la historia del planeta humo".

La confesión de Jordán Peña no cerró el caso. A día de hoy, existen múltiples interpretaciones sobre la verdadera naturaleza del fenómeno Ummo:

Perspectiva

Argumentos Clave y Defensores

Citas Relevantes

Fraude Total

La opinión más extendida es que fue un engaño masivo orquestado por José Luis Jordán Peña y su entorno. Consideran que su confesión es la explicación definitiva.

"Mi opinión personal es que humo es exactamente eso un fraude que hizo Jordán Peña"

"Tengo la sospecha de que detrás de todas aquellas cartas [...] está José Luis Jordán Peña [...] Por lo tanto no hay más conclusión que decir que se trató de un gran fraude".

Experimento Sociológico

Sugiere que el caso pudo ser un experimento social para estudiar la credulidad y la difusión de información. Jordán Peña pudo haber sido el ejecutor, pero sirviendo a "otros intereses que de momento permanezcan en el anonimato".

"Cabe la posibilidad de que pudiera haberse tratado de algún tipo de ensayo de experimento de tipo sociológico".

Núcleo de Autenticidad

Sostiene que, aunque el caso fue contaminado e intervenido por Jordán Peña, el fenómeno original era auténtico. Citan la complejidad de los textos y eventos inexplicados.

"Hay parte del que sí probablemente Alguien ha metido la mano por supuesto Pero hay otra parte del del fenómeno desde su arranque que es auténtico"

"Yo pienso que el fenómeno es real Aunque Alguien ha metido la mano y ha contaminado el caso".


5. Conclusión: la tertulia de la Ballena alegre renace como metáfora de Madrid (y de sus subsuelos)

La Ballena Alegre «recobró vida» en un contexto insospechado porque su función profunda no era ideológica, sino social: alojar conversación intensa. En un país que miraba a la modernidad con mezcla de fascinación y encierro, el relato extraterrestre permitía soñar un futuro hipertecnológico y, a la vez, practicar una forma segura de heterodoxia: hablar de lo imposible con el lenguaje de lo plausible.

Ese es, quizá, el hallazgo más sugerente: Ummo no es solo una historia de engaño o credulidad. Es una historia sobre cómo los espacios —y las comunidades— fabrican realidad compartida.









A pesar de las décadas transcurridas, el fenómeno Ummo deja importantes interrogantes. La principal duda es cómo una sola persona como Jordán Peña "pudo el solo escribir miles de páginas de un altísimo contenido técnico científico, enviándolas además desde diferentes partes del mundo".

Además, eventos posteriores, como el avistamiento de Vorónezh (Rusia) en 1989, donde testigos infantiles dibujaron una nave con el símbolo ummita, mantienen viva la controversia.

Independientemente de su origen, el caso Ummo es considerado "digno de estudio como ninguna otra cosa" dentro de la ufología por su complejidad, su longevidad y su profundo impacto en la cultura popular, demostrando cómo una narrativa bien construida puede cautivar la imaginación de miles de personas durante generaciones.


Bibliografía completa (fuentes académicas y universitarias)

  1. Cabria García, Ignacio. Entre ufólogos, creyentes y contactados: Una historia social de los ovnis en España. Santander: Cuadernos de Ufología, 1993. ISBN 84-604-7077-6. Academia+3Academia+3Academia+3

  2. Cabria García, Ignacio. OVNIs y ciencias humanas: Un estudio temático de la bibliografía (1947–2000). Santander: Fundación Anomalía, 2002 [i. e., 2003]. ISBN 84-607-6545-8. Academia+2Dialnet+2

  3. Gomara Ontivero, Leire. El peso del mito en la propagación de la desinformación: Análisis de casos de difusión de teorías y creencias en torno al fenómeno OVNI. Trabajo Fin de Grado (Grado de Comunicación), Universitat Oberta de Catalunya (UOC), junio 2024. Open Access UOC

  4. Moriente Díaz, David. ¿España, me reciben? Astronáutica y cultura popular (1957–1989). Cuenca: Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha; Santander: Editorial de la Universidad de Cantabria, 2019. Academia+1

  5. Carbajosa, Mónica; Carbajosa, Pablo. La corte literaria de José Antonio. Barcelona: Crítica, 2003.

  6. Festinger, Leon; Riecken, Henry W.; Schachter, Stanley. When Prophecy Fails: A Social and Psychological Study of a Modern Group that Predicted the Destruction of the World. Minneapolis: University of Minnesota Press, 1956. Academia

  7. Jung, C. G. Un mito moderno sobre cosas que se ven en el cielo (obra citada y discutida en la tradición psicosocial del fenómeno OVNI). Academia

  8. Cabria (1993): para la reconstrucción histórica de grupos, tertulias y el ecosistema Ummo en sus fases tempranas. Academia+1

  9. Gomara (2024): para conectar Ummo con marcos actuales de desinformación y persistencia del mito. Open Access UOC

  10. Moriente (2019): para situar la «cultura del espacio» en la España del desarrollismo y su imaginario mediático. Academia

domingo, 14 de diciembre de 2025

El tercer hombre (The Third Man), estrenada en 1949 y dirigida por Carol Reed.

Pertenece al género de thriller, film noir y misterio. El elenco principal incluye a Joseph Cotten como Holly Martins, Orson Welles como Harry Lime, Alida Valli como Anna Schmidt y Trevor Howard como el Mayor Calloway. Entre sus premios destacan el Oscar a la Mejor Fotografía en Blanco y Negro (Robert Krasker), nominaciones adicionales en los Academy Awards (Mejor Director y Mejor Montaje), un BAFTA a la Mejor Película Británica y el Gran Premio en el Festival de Cannes.

La cinematografía de Robert Krasker captura una Viena de posguerra en ruinas, con un estilo expresionista que enfatiza sombras oblicuas y un contraste marcado entre la oscuridad de las alcantarillas y la decadencia urbana, convirtiendo la ciudad en un personaje central. 


El Tercer Hombre simboliza el espionaje y la duplicidad moral en la Guerra Fría, inspirado en historias reales de agentes dobles en Viena. 

Curiosidades incluyen que Orson Welles solo rodó una semana, rechazando filmar en las alcantarillas reales por su olor, lo que llevó a reconstruir sets en Inglaterra. Martin Scorsese escribió una tesis sobre la película en la escuela de cine, recibiendo un B+ con el comentario "olvídalo, es solo un thriller". 

La banda sonora.

Fue compuesta y interpretada íntegramente por Anton Karas, un músico vienés hasta entonces desconocido, utilizando exclusivamente la cítara (zither), un instrumento de cuerda pulsada tradicional en la música folclórica austriaca. La partitura incluye el icónico "The Third Man Theme" (también conocido como "Harry Lime Theme"), que se convirtió en un éxito internacional, alcanzando el número 1 en las listas de Estados Unidos durante 11 semanas en 1950. 

No se empleó orquesta ni otros instrumentos, lo que marca un hito en la historia del cine por su minimalismo. Críticos especializados coinciden en que la banda sonora eleva a la película a un nivel maestro del cine noir. 

Karas era un músico callejero sin formación clásica, fue descubierto por Reed en un Heuriger vienés durante una cena con el elenco, llevando a una colaboración improvisada que cambió su vida; tras el éxito, abrió un bar llamado "Der Dritte Mann" en Viena.

La Matritense: Primera logia masónica española fundada en Madrid, en 1728.

La fundación en Madrid, en 1728, de la logia masónica conocida como «Las Tres Flores de Lys» o «La Matritense», en el hotel del mismo nombre de la calle de San Bernardo, por un grupo de ingleses y jacobitas exiliados, varios militares al servicio de España, reunidos en un hotel madrileño, que reproducen sus costumbres asociativas en el extranjero, entraba en fricción estructural con los pilares del Antiguo Régimen hispánico: monarquía absoluta e Iglesia católica como garante de la unidad de fe.

Actual número 17 de la madrileña calle de San Bernardo, esquina con la calle de la Garduña (hoy día de La Palma), siendo ésta precisamente la calle de entrada para las tenidas. 


1. Masonería moderna y sociabilidad ilustrada en Inglaterra: la masonería especulativa en Europa

El punto de partida es Londres, 1717, con la creación de la Gran Logia de Londres, considerada el acto fundacional de la masonería especulativa moderna. Esta masonería ya no es la de los antiguos gremios de constructores (masonería «operativa»), sino una fraternidad filosófica dentro de un marco ritual y simbólico.

Las Constituciones de Anderson (1723) cristalizan ese proyecto. El célebre primer artículo religioso define la «religión del masón» como una religión natural y universal, en la que puedan coincidir hombres de diversas confesiones, dejándoles libertad en sus opiniones particulares. La logia se concibe como «centro de unión» donde se reúnen individuos de distintas procedencias sociales y políticas para convivir “como hermanos”. En coherencia con ello, se prohíbe expresamente discutir de religión o de política en logia, para evitar divisiones.

En el plano social, la masonería se convierte en espacio de encuentro entre aristócratas, burgueses acomodados, profesionales liberales y hombres de ciencia, ofreciendo una red de prestigio, ayuda mutua y circulación de ideas.

1.1 Expansión continental y «francesización» del modelo

El modelo inglés cruza pronto el canal de la Mancha y se expande por Europa en las décadas de 1720 y 1730. Francia se convertirá en el gran laboratorio de transformación.
El discurso del chevalier Ramsay dota a la masonería de una genealogía aristocrática, enlazándola con las órdenes de caballería medievales y, en particular, con los templarios. Esa reinterpretación «caballeresca» dota al movimiento de un prestigio histórico y simbólico muy atractivo para la nobleza de corte.
Tenida masónica. Wikipedia

Surgen nuevos ritos y altos grados, como el Rito Escocés, que complejizan la estructura más sobria de tres grados del modelo inglés (Aprendiz, Compañero, Maestro) y abren la puerta a una mayor carga mítica y templaria.

Es en este contexto –cuando la masonería ha pasado de ser una curiosidad británica a un fenómeno europeo– donde debe situarse la fundación de la primera logia en Madrid. No se trata de un experimento aislado, sino de un episodio español de un proceso transnacional.


2. La España del primer Borbón: El nuevo orden tras Utrecht y la llegada de exiliados jacobitas

El Tratado de Utrecht (1713) fija el nuevo mapa de Europa tras la Guerra de Sucesión Española. Felipe V conserva la corona de España, pero a costa de ceder territorios y privilegios comerciales a las potencias vencedoras.
Bandera del Rgto. Hibernia. Wikipedia.
España se convierte en refugio de exiliados jacobitas: nobles, oficiales y soldados británicos e irlandeses que han permanecido leales a la dinastía Estuardo. Muchos de ellos –en particular los irlandeses católicos– ingresan en el Ejército español, encuadrados en regimientos como Hibernia, Irlanda o Ultonia.

Este contingente no solo aporta experiencia militar. Trae consigo culturas políticas y formas de sociabilidad forjadas en el mundo británico: clubs, sociedades, y, de forma creciente, la masonería especulativa. Los fundadores de «La Matritense» pertenecen precisamente a este universo de militares exiliados que sirven a la Corona española pero conservan mentalidades y prácticas asociativas de origen británico.


3. La fundación de «La Matritense» (1728): un enclave británico en Madrid. El acto fundacional y la documentación

La primera logia especulativa en suelo español se funda en Madrid, el 15 de febrero de 1728, en el Hotel de las Tres Flores de Lys, en la calle ancha de San Bernardo.
Los propios fundadores remiten ese mismo día una carta a la Gran Logia de Londres, en la que explican que, hallándose en Madrid Su Gracia el duque de Wharton, ex Gran Maestre de Inglaterra, le han solicitado que constituya una logia.
Solicitan ser inscritos en el registro inglés como «Logia de Madrid», que en la práctica será conocida también como «La Matritense» y «Three Flower-de-Luce», por el emblema del hotel.

4. Los protagonistas: expatriados y militares al servicio de España

El grupo fundador presenta un perfil notablemente homogéneo. Extranjeros (anglófonos): todos los firmantes de la carta son británicos o irlandeses; la logia es, en origen, monolingüe inglesa.
Vinculados al Ejército o al servicio del Estado español: varios son oficiales jacobitas integrados en regimientos al servicio de Felipe V; otros, como Labelye, trabajan en proyectos de ingeniería bajo contrato de la Corona.
Portadores de cultura política y masónica de origen británico: al menos tres (Wharton, Labelye, Hatton/Richards) eran ya masones formados, iniciando al resto.

Philip Wharton, duque de Wharton: del Gran Maestre inglés al coronel de Felipe V

Wharton encarna a la perfección la ambivalencia del siglo: Noble inglés de altísima alcurnia, líder masón precoz, conspirador jacobita, católico converso y coronel del Ejército español.
Philip Wharton. Wikipedia
Gran Maestre de la Gran Logia de Londres (1722-1723), figura central de la masonería británica en sus primeros años.
Tras su giro jacobita, entra al servicio de los Estuardo, participa en conspiraciones contra la dinastía Hanover y acaba exiliado en España, donde se convierte al catolicismo y es nombrado coronel del Regimiento de Hibernia.
Participa en el sitio de Gibraltar (1727) combatiendo contra tropas inglesas, lo que le valdrá posteriormente una condena por alta traición en su país.
Como masón, actúa en Madrid «en calidad de Diputado del Gran Maestro», legitimando la logia ante Londres y dando cobertura formal a los expatriados.
Wharton no es solo un personaje pintoresco, sino el vector que trae a Madrid el modelo de sociabilidad masónica inglesa: conoce las Constituciones de Anderson, ha presidido una Gran Logia y entiende la logia como espacio de neutralidad interna frente a las pasiones políticas externas.

Charles de Labelye: ingeniero ilustrado y articulador entre Londres y Madrid

El ingeniero Charles de Labelye, suizo hugonote formado en Inglaterra, es el Venerable Maestro de «La Matritense».
Discípulo de Desaguliers, encarna el ideal de hombre de ciencia protestante atraído por la sociabilidad masónica.
Charles Labelye. Tutledove.fandom
Trabaja para intereses ingleses en España, pero comparte pensión y mesa con jacobitas en el Hotel du Lys: es un personaje de frontera, científicamente ilustrado y políticamente ambiguo.

Su papel clave es doble:
  • Internamente, organiza la logia, preside las tenidas y garantiza la regularidad del trabajo masónico.
  • Externamente, funciona como intermediario con Londres: lleva las actas y defiende la regularidad de la logia ante la Gran Logia.
De regreso en Inglaterra, será el ingeniero responsable del puente de Westminster, símbolo material de la Inglaterra ilustrada.

Richards y Hatton: masones veteranos, cuadros de logia

De Richards y Thomas Hatton sabemos poco más allá de sus apellidos y cargos (Vigilantes), pero su función es nítida: son parte del núcleo de masones formados que pueden dirigir ceremonias, instruir a los iniciados y sostener la vida ritual. 
Comerciantes, empleados de compañías inglesas o funcionarios al servicio de intereses británicos en Madrid. Hombres habituados a la sociabilidad de clubs y tabernas londinenses, que reproducen en el Hotel du Lys una atmósfera de club británico en miniatura.
Su presencia subraya que «La Matritense» nace como prolongación de logias inglesas, no como creación autóctona.

Eldridge Dinsdale y Andrew Galloway: irlandeses jacobitas y militarización de la sociabilidad

Los nombres de Eldridge Dinsdale y Andrew Galloway remiten a un mundo distinto: el de los irlandeses jacobitas al servicio de España.
Dinsdale y Galloway son muy probablemente oficiales o agentes irlandeses, vinculados a proyectos de reclutamiento y conspiraciones pro-Estuardo. 
Se sabe que Galloway estuvo implicado en intentos de transportar tropas desde España para una posible invasión de Inglaterra.
Su iniciación en Madrid introduce en la logia la experiencia de quienes combinan vida militar, exilio y cultura política jacobita.
Su presencia permite matizar el carácter de la logia: no es solo sociabilidad ilustrada «desde arriba», sino también espacio de cohesión para una comunidad militar expatriada, con fuertes vínculos emocionales y políticos entre sus miembros.

5. «La Matritense» como enclave británico y club de expatriados

La logia de 1728 debe entenderse, en primer lugar, como enclave británico/irlandés en el corazón de Madrid:
  • La composición inicial es exclusivamente extranjera; no hay españoles documentados entre los primeros miembros.
  • El lugar de reunión –un hotel de propietarios franceses, frecuentado por extranjeros– actúa como espacio relativamente protegido frente al ojo social madrileño.
  • La función primordial parece ser la de club de sociabilidad y apoyo mutuo para expatriados: un lugar donde hablar en su lengua, relajarse tras el servicio militar o diplomático y recrear un ambiente cultural familiar.
lamatritense.es
Desde esta perspectiva, «La Matritense» es un intento de «miniaturizar Londres» en Madrid: reproducir la combinación de taberna, club y logia que había caracterizado el surgimiento de la masonería inglesa.


Pero, al mismo tiempo, su mera existencia en la capital de la Monarquía Católica –aunque no pretenda inicialmente hacer proselitismo entre españoles– introduce en el tejido urbano un tipo de asociación disciplinada, discreta, transnacional y religiosamente plural, cuyos principios chocan de lleno con el imaginario del Viejo Régimen..

Las fuentes sugieren que la actividad documentada de la logia es muy breve: No hay constancia de tenidas regulares más allá de los primeros años.
En 1768, la logia desaparece de los registros de la Gran Logia de Inglaterra por inactividad prolongada.
Sin embargo, su memoria simbólica reaparece cuando, en 1767, la masonería española se organiza en el Gran Oriente de España: «La Matritense» será reconocida a posteriori como logia matriz o número 1 de la obediencia. Esa reconstrucción retrospectiva confirma que las generaciones ilustradas de Carlos III veían en la logia de 1728 el origen de la masonería en España.

6. La reacción institucional: Iglesia y Estado contra la sociabilidad masónica

La rápida difusión de la masonería por la Europa católica lleva a la Santa Sede a pronunciarse. La bula «In eminenti apostolatus specula» de Clemente XII (1738) constituye la primera gran condena de la masonería.

Los argumentos centrales, según la sistematización de Rogelio Aragón y otros autores, son tres:
  • El secreto de las reuniones: la opacidad de las logias se interpreta como prueba de intenciones ilícitas. Si sus actos fueran inocentes, no tendrían por qué ocultarse.
  • El juramento de secreto: el compromiso bajo juramento se ve como vínculo que puede entrar en conflicto con los deberes del fiel hacia la Iglesia y del súbdito hacia el soberano.
  • El «naturalismo» o indiferentismo religioso: la pretensión masónica de reunir en una misma fraternidad a hombres de diversas confesiones, sobre la base de una religión natural común, se juzga incompatible con la afirmación católica de poseer la única verdad.
La bula concluye prohibiendo a los católicos pertenecer a logias masónicas, bajo pena de excomunión. Años después, Benedicto XIV, con la bula «Providas Romanorum Pontificum» (1751), refuerza esa condena y reitera que los masones son enemigos tanto de la Iglesia como del Estado, por violar simultáneamente leyes divinas y civiles.
 

7. La recepción en España de las bulas papales

En España, la aplicación de estas bulas no es automática. Cualquier documento pontificio debe superar el filtro del Regio Exequatur. Es la Corona quien decide si se publica y cómo se aplica, de acuerdo con sus propios intereses.

Felipe V se muestra receptivo a la condena moral, pero no promulga un edicto general antimasónico. Será Fernando VI quien, en 1751, emita un Real Decreto de prohibición de la masonería. En él se declaran ilícitas las logias, se describen como peligrosas para la religión y el Estado, y se ordena perseguir a sus miembros. La afiliación masónica se convierte así explícitamente en delito.
 

7.1. La Inquisición como brazo ejecutor del binomio Trono–Altar

La Inquisición ofrece a la monarquía una herramienta lista para actuar. Dispone de un marco jurídico que considera la desviación religiosa como delito civil además de una red territorial de tribunales y agentes capaces de investigar, detener e interrogar.
En el siglo XVIII, cuando la herejía protestante ha dejado de ser una amenaza inmediata dentro de la Península, la masonería, con su aura de secreto y su reputación, se convierte en objetivo: moderna, extranjera, difícil de encajar en las categorías doctrinales tradicionales, pero fácilmente demonizable.

Los primeros procesos inquisitoriales por masonería en España –como el del francés Tournon en Madrid o el del padre Torrubia poco después– muestran que se persigue en primer lugar a extranjeros y eclesiásticos, es decir, a quienes aparecen como importadores de una sociabilidad foránea.

8. Conclusiones: La logia «La Matritense» de 1728 no fue un simple capricho de un duque excéntrico.

  • Introducción temprana de la sociabilidad ilustrada masónica en la España borbónica. La logia madrileña constituye el primer ensayo documentado de implantar en España un modelo de sociabilidad basado en:
  • Tolerancia práctica entre confesiones (al menos dentro del templo).
  • Igualdad simbólica entre hombres de distinto rango social.
  • Neutralización de la política partidista en el espacio interno.
  • Nacido en Inglaterra y reelaborado en Francia, ese modelo llega a Madrid de la mano de militares y técnicos extranjeros, que lo insertan en la corte de Felipe V en forma de club discreto de expatriados.
  • Un episodio en la historia del Ejército español como espacio de circulación de ideas: El hecho de que varios fundadores sean militares al servicio del Ejército español –Wharton, Dinsdale, Galloway– subraya el papel del estamento militar como canal de transferencia cultural. En sus filas se mezclan tradiciones británicas, irlandesas, francesas y españolas; la logia es una de las formas en que esa mezcla se expresa institucionalmente. Desde esta perspectiva, «La Matritense» abre una línea de investigación sobre la militarización de la sociabilidad ilustrada en España y sobre cómo los contactos internacionales de los oficiales contribuyeron a la circulación de ideas modernas.
  • Catalizador de la reacción: del recelo a la persecución sistemática: Activar la alarma de la Iglesia (bula In eminenti, 1738) y, más tarde, de la Corona (decreto de 1751).
En suma, la historia de «La Matritense» puede leerse como la primera chispa de un largo conflicto ideológico que marcará la evolución política, social y cultural de España durante los siglos XVIII y XIX. A través de la reconstrucción de este pequeño círculo de expatriados –sus biografías, sus lealtades, sus rituales– es posible observar, en miniatura, el modo en que la sociabilidad masónica llegó a España.


Fuentes Citadas

  • Aragón, Rogelio. Contra la Iglesia y el Estado: Masonería e Inquisición en la Nueva España, 1760 – 1820. Tesis de Licenciatura, Universidad Nacional Autónoma de México.
  • Ferrer Benimeli, José Antonio. "La Historia ante la Masonería. Reflexiones metodológicas". El Basilisco (Oviedo) 9 (enero-abril 1980): 31-40.
  • Ferrer Benimeli, José Antonio. La masonería. Madrid: Alianza Editorial, 2001.
  • Rodríguez de Coro, Francisco. Los Masones, 1728-1945. Introducción a la Historia de la Masonería en Euskal Herria. Vitoria: Fundación Sancho el Sabio, 1992.

Monografías y tesis

  • Aragón Juárez, Rogelio. «Contra la Iglesia y el Estado: masonería e Inquisición en la Nueva España, 1760-1820».
  • Tesis de licenciatura, Universidad Nacional Autónoma de México / Instituto Cultural Helénico, 2006. (repositorio.unam.mx)
  • Ferrer Benimeli, José Antonio. «La masonería». Madrid, Alianza Editorial, varias ediciones (especialmente la de 2001 y la reedición ampliada de 2019). (Amazon).
  • Rodríguez de Coro, Francisco. «Los masones, 1728-1945. Introducción a la historia de la masonería en Euskal Herria». Vitoria-Gasteiz, Fundación Sancho el Sabio, 2.ª ed., 1992. (euskalmemoriadigitala.eus)
  • Berman, Ric. «The Foundations of Modern Freemasonry: The Grand Architects: Political Change and the Scientific Enlightenment, 1714-1740».
  • Sussex Academic Press / Liverpool University Press, 2012 (ed. revisada 2022). (jstor.org)
  • Gould, Robert Freke. «Gould’s History of Freemasonry Throughout the World», vol. III.
  • Charles Scribner’s Sons, 1887. (Consultado a través de referencias y extractos en estudios sobre la masonería en España). (Wikipedia)

Artículos académicos y estudios especializados

  • Ferrer Benimeli, José Antonio. «La Historia ante la masonería. Reflexiones metodológicas»,
  • El Basilisco, n.º 9, enero-abril 1980, pp. 31-40. (fgbueno.es)
  • Aragón Juárez, Rogelio. Reseñas y artículos derivados de la tesis «Contra la Iglesia y el Estado: Masonería e Inquisición en la Nueva España, 1760-1820», en Revista de Estudios Históricos de la Masonería Latinoamericana y Caribeña (REHMLAC) y otros repositorios académicos. (Dialnet)
  • Schuchard, Marsha Keith. «The Political-Masonic Background to the 1738 Papal Bull In eminenti», Heredom: The Transactions of the Scottish Rite Research Society, vol. 23, 2015, pp. 55-106. (Academia)
  • Lyttle, Charles H. «Historical Bases of Rome’s Conflict with Freemasonry», Church History, vol. 9, n.º 1 (1940), pp. 3-23. (jstor.org)
  • De los Reyes Heredia, Guillermo. Artículos sobre masonería, Iglesia e Inquisición en REHMLAC (usados para matizar el contexto inquisitorial del siglo XVIII). (Redalyc).
  • Jimeno Yepes, Francisco M. «Un estudio del reconocimiento entre Grandes Logias…» (referencias al error de fecha y al nombre de la French Arms en Madrid). (Tandfonline)
  • Keith Schuchard, Marsha. «Jonathan Swift, the Earl of Rosse, Duke of Wharton, and Sir Gilbert Eliot» (sobre redes jacobitas y trayectoria masónica/política de Wharton). (scielo.sa.cr)

Estudios y recursos específicos sobre la logia de Madrid y la masonería en España

  • «Francmasonería en España», Wikipedia en español (sección inicial sobre la primera logia, «La Matritense»). (Wikipedia)
  • «Freemasonry in Spain», Wikipedia en inglés (apartado «Early Lodges», con la referencia a la lodge in Madrid of 1728). (Wikipedia)
  • «Historia» de la R.·.L. «La Matritense» (sitio oficial de la logia actual). Información sobre la identificación con la logia de Madrid n.º 50, el Hotel du Lys y la continuidad simbólica. (lamatritense.es)
  • «Acta primera logia de España», R.·.L. Cibeles (reconstrucción/divulgación de la carta a la Gran Logia de Inglaterra y de la inscripción como n.º 50). (cibeles.org)
  • Artículo «300 aniversario de la masonería especulativa» (Asociación TAU) Referencias al número de registro n.º 50, al Hotel de Lys y a la localización en la calle San Bernardo, Madrid. (logiatau12.com)
  • «Philip Wharton, 1st Duke of Wharton», Wikipedia en inglés (base cronológica y política). (Wikipedia)
  • «Philip, Duke of Wharton», Biografía en la web de la Grand Lodge of British Columbia and Yukon, con referencia a su papel en la fundación de la logia nº 50 «French Arms» en Madrid. (freemasonry.bcy.ca)
  • «TRES CARTAS DE PEDRO DE LÁZARO MARTÍN», Centro de Cultura de Gijón (artículo divulgativo sobre Wharton, su estancia en Madrid y la fundación de la logia Matritense / French Arms / Three Flowers of Lys). (Cultural Gijonesa)
  • «Charles Labelye», Entrada de Wikipedia en inglés (ingeniero suizo, posterior nacionalización británica). (Wikipedia)
  • «Charles Labelye», Entrada en Encyclopaedia Britannica y ficha biográfica del British Museum (confirmación cronológica y profesional). (Encyclopedia Britannica)
  • «History of Emulation Lodge No. 67» (sitio de la logia Emulation n.º 67, Reino Unido), con mención a la «French Arms Lodge n.º 50» en Madrid como primera logia en España. (emulation67.com)

Contexto general sobre la masonería inglesa y la Gran Logia de Londres

  • «Premier Grand Lodge of England», Wikipedia en inglés (fundación de 1717, estructura de la Gran Logia y listado de Grandes Maestros, incluyendo a Philip Wharton). (Wikipedia)
  • «John Theophilus Desaguliers», Wikipedia en inglés (difusión de la física newtoniana, rol en la redacción de las Constituciones de Anderson y en la consolidación de la Gran Logia). (Wikipedia)
  • «In eminenti apostolatus», entrada de Wikipedia en inglés sobre la bula de Clemente XII (28 de abril de 1738) contra los francmasones. (Wikipedia)
  • Lyttle, Charles H. «Historical Bases of Rome’s Conflict with Freemasonry», Church History, 9:1 (1940), 3-23 (ya citado arriba como artículo, aquí usado específicamente para el trasfondo de la bula). (jstor.org)
  • Schuchard, Marsha Keith. «The Political-Masonic Background to the 1738 Papal Bull In eminenti», Heredom, 23 (2015), 55-106 (también citado arriba; usado para el nexo jacobitismo-masonería). (Academia).

domingo, 30 de noviembre de 2025

El Extraño del Tercer Piso (Stranger on the Third Floor) 1940.

Considerada el origen del cine negro: 

Director: Boris Ingster (en su debut como director). Elenco principal: John McGuire como Michael Ward (el reportero protagonista), Margaret Tallichet como Jane (su novia), Peter Lorre como El Extraño (un misterioso fugitivo), Charles Waldron como el Fiscal del Distrito, y Elisha Cook Jr. como Joe Briggs (el acusado inicial).

No recibió premios mayores en su época, ya que se trata de una producción de bajo presupuesto (B-movie) de RKO Pictures. Sin embargo, ha sido reconocida retrospectivamente como una obra seminal en la historia del cine negro, incluida en antologías y festivales dedicados al género.

La trama gira en torno a Michael Ward, un reportero que testifica en un juicio por asesinato, lo que lleva a la condena de un inocente. Pronto, Ward se ve atormentado por dudas y visiones paranoicas, culminando en un encuentro con un extraño que podría ser el verdadero culpable.


La película está influenciada fuertemente por el expresionismo alemán de directores como Fritz Lang y Robert Wiene.

El montaje es innovador, especialmente en la secuencia onírica central —una pesadilla surrealista de unos cuatro minutos que anticipa técnicas usadas por Orson Welles en Citizen Kane (1941) -. Esta secuencia, con sus sets estilizados y sombras proyectadas, evoca directamente El gabinete del Dr. Caligari (1920).

La secuencia onírica, con su silla eléctrica sombreada y barras angulares, se considera un precursor directo de Citizen Kane, posiblemente influenciando a Welles, quien admiraba el expresionismo.
El bajo presupuesto ($150,000 estimado) obligó a usar sombras para "ocultar" sets inexistentes, convirtiendo una limitación en una virtud estilística que definió el noir.


sábado, 29 de noviembre de 2025

Militares masones y poder de la masonería en el Ejército de España (siglos XVIII-XXI)

La relación entre masonería y Ejército en España ha sido, durante al menos dos siglos, tan intensa como discreta. En la historiografía y en el imaginario colectivo han captado más atención los tópicos –la identificación mecánica entre «militar, liberal y masón»– que el análisis riguroso de trayectorias concretas y contextos institucionales. 
Sin embargo, investigaciones recientes muestra que un número nada desdeñable de oficiales del Ejército y la Armada perteneció a logias desde el siglo XVIII hasta la Guerra Civil, es decir, desde los primeros indicios de la masonería especulativa en España hasta la derrota de la Segunda República, y cómo esa pertenencia influyó en su sociabilidad, redes de confianza y en su acción política.
Imagen: Joaquín Rivera Chamorro
La masonería se define a sí misma como una «institución universal, ética, filosófica e iniciática», basada en la fraternidad, la búsqueda racional de la verdad y el perfeccionamiento moral. Esa auto-definición, aparentemente apolítica, chocó en España con la temprana asociación de logias con conspiraciones liberales. De ahí que, desde muy pronto, la masonería fuera percibida como una amenaza para el poder político instaurado en cada periodo histórico.
La presencia de militares del Ejército y la Armada españoles en logias masónicas, y las interacciones que se generan entre la institución castrense y la Orden, en sus dimensiones ideológicas, sociales y represivas, plantea estas preguntas:
  • ¿Qué usos políticos, corporativos o de sociabilidad tienen las logias con militares en cada etapa?.
  • ¿Hasta qué punto la pertenencia masónica condiciona carreras, lealtades y alineamientos en conflictos como los pronunciamientos del XIX, las crisis coloniales o la Guerra Civil?.
  • ¿Qué distingue el caso español de otras experiencias de masonería militar (Francia, Estados Unidos, América Latina)?
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Masonería especulativa: La masonería especulativa se diferencia de la masonería operativa en que esta última se dedicaba a la construcción física de edificios, mientras que la primera utiliza la simbología de los constructores para la "construcción" moral, intelectual y espiritual del individuo. Se considera el nacimiento de la masonería moderna a partir de la unión de cuatro logias en Londres en 1717.



1. Historiografía sobre masonería en España.

La historiografía sobre masonería en España ha avanzado de manera muy significativa desde los años setenta del siglo XX. José Antonio Ferrer Benimeli y el equipo de la UNED son referencias ineludibles en la reconstrucción de la cronología, las obediencias y la implantación territorial de la Orden, incluyendo su estudio de la relación a través de logias y militares a partir de 1801 y durante la Guerra de la Independencia.
Otros autores, como Manuel de Paz Sánchez o Julio de Paz, han analizado el papel de la masonería en la pérdida de las colonias y en el ámbito atlántico, matizando el papel de la masonería en determinados momentos.

Imagen: El Castillo de San Fernando noticias.
En relación específica con los militares, destacan:
  • Ezequiel Ignacio García-Municio de Lucas, «Militares y masonería» (tesis doctoral, UCM), donde se estudian decenas de oficiales masones entre 1728 y 1936, combinando hojas de servicio y expedientes masónicos.
  • Artículos de Alberto Valín Fernández sobre masonería y militares en la historia de España, que abordan el imaginario del «militar, liberal y masón».
  • Estudios recientes sobre logias coloniales y norteafricanas, como la logia «Hijos de la Africana» en Melilla o los talleres de Ceuta, que muestran la función de la masonería como red de apoyo mutuo en campañas de ultramar.
  • Sobre la Segunda República y la Guerra Civil, trabajos de Rivero, Busquets o Cardona han analizado el peso simbólico y real de la masonería en el Ejército republicano y su relación con organizaciones como la Asociación Militar Republicana (AMR) y la Unión Militar Republicana Antifascista (UMRA).
  • En cuanto al régimen de Franco, la Ley y el Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo (TERMC) han sido estudiados por Guillermo Portilla y otros especialistas en derecho penal.
Las logias se entienden como espacios de sociabilidad ritualizada donde se construyen redes de confianza, se comparten valores éticos y se generan capitales simbólicos (honor, prestigio) que pueden proyectarse sobre la carrera profesional.
Los militares formaban ya parte de un grupo estatal con cultura política propia. La pertenencia masónica se superpone a ese habitus castrense sin sustituirlo, generando lo que algunos autores han descrito como «élites solapadas» (militar y masónica).
El militar masón se debe simultáneamente al juramento a la Bandera y al compromiso fraternal masónico. La tensión entre ambas lealtades se hace crítica en momentos de crisis política extrema (pronunciamientos, guerras civiles, dictaduras).

2. Orígenes de la masonería militar (siglo XVIII – 1814): Primeras logias y reacción del Antiguo Régimen

Los primeros indicios documentados de masonería en España se sitúan en 1728, con la fundación en Madrid de una logia impulsada por el duque de Wharton, noble inglés y coronel al servicio de la Corona española. Sin embargo, tanto esta logia como las de Gibraltar o Menorca fueron esencialmente iniciativas británicas y no pueden considerarse todavía masonería española en sentido pleno.
El giro decisivo se produce cuando la monarquía borbónica percibe la masonería como un cuerpo extraño, sospechoso para el Estado. El Real Decreto de 2 de julio de 1751, de Fernando VI, prohíbe explícitamente las reuniones de francmasones por considerarlas «sospechosas a la Religión y al Estado» y ordena a los mandos militares privar de sus empleos «con ignominia» a los oficiales que pertenecieran a la Orden.
El mensaje es contundente: la disciplina castrense y la obediencia al soberano son incompatibles con la pertenencia a sociedades secretas.
Imagen: BNE.
Pese a las prohibiciones, la masonería siguió presente de manera clandestina y, en ocasiones, en el extranjero. Un hito fundacional de la masonería militar española es la logia «La Reunión Española», creada en el puerto francés de Brest en 1801. Estaba integrada por una treintena de militares españoles de la escuadra bloqueada (oficiales de la Armada), y trabajó bajo la obediencia del Gran Oriente de Francia hasta su disolución en 1802.
«La Reunión Española» es significativa por tres motivos:
  • Es el primer taller propiamente español constituido casi exclusivamente por militares.
  • Su función principal fue el auxilio fraternal y la cohesión de una comunidad de oficiales aislados, más que la conspiración política.
  • Sus miembros regresaron después a puertos como Cádiz o A Coruña, llevando consigo el «espíritu masónico» e impulsando la fundación de nuevas logias en territorio español.



3. Guerra de la Independencia y politización inicial

La Guerra de la Independencia (1808-1814) actúa como auténtico catalizador de la masonería militar. La invasión napoleónica trae consigo logias militares francesas en diversas ciudades (Figueras, Sevilla, etc.) y una Gran Logia Nacional bajo la monarquía de José I, mientras que en la España «juntista» de Cádiz la masonería es prohibida y asociada a la «francesada».
Wikipedia

En este contexto, la Orden se vincula de manera creciente a las corrientes liberales y constitucionales: muchos militares con inquietudes ilustradas ven en las logias un espacio de debate y organización frente a la monarquía, al tiempo que la jerarquía eclesiástica y monárquica la considera un foco de subversión. Ese relato identificando la masonería y el liberalismo, forjado en la guerra y consolidado con la Constitución de Cádiz de 1812, condicionará todo el siglo XIX.






4. El siglo de los pronunciamientos (1814 – 1874)

La restauración absolutista de Fernando VII (1814) inaugura la etapa de máxima simbiosis entre liberalismo, ejército y masonería. El pronunciamiento de Rafael del Riego en 1820, que fuerza al rey a jurar la Constitución de 1812 y abre el Trienio Liberal, está estrechamente ligado a redes masónicas y a otras sociedades secretas como los Comuneros. Las logias funcionan entonces como lugares de conspiración clandestina contra el régimen absolutista.


Figuras como Evaristo San Miguel, Antonio Quiroga o el infante Francisco de Paula de Borbón, citado en algunas fuentes como Gran Maestre, encarnan esa relación entre militares masones contra Fernando VII. Se consolida así el relato del «militar, liberal y masón» que tanta fortuna tendrá en la historiografía posterior.
 

5. Isabel II, Sexenio y «espadones» liberales

Durante el reinado de Isabel II y el Sexenio Democrático (1868-1874), la participación de altos mandos en política y logias continúa. El general Baldomero Espartero, regente del Reino, aparece en varias fuentes como iniciado en América; el general Juan Prim, líder de la Revolución de 1868, fue considerado masón por muchos contemporáneos aunque su pertenencia formal no esté probada de manera concluyente.


En este periodo, las logias siguen siendo núcleos de sociabilidad liberal y espacios de reclutamiento político. Se relacionan con la prensa y los clubes políticos, reforzando el papel como actor público.
Contribuyen a la elaboración de proyectos de reforma (monarquía constitucional, federalismo, republicanismo). La Primera República (1873-1874) culmina este ciclo de politización. Tras su fracaso y la restauración borbónica, la masonería entra en una fase de mayor discreción, aunque no desaparece.

6. Masonería, Restauración y crisis coloniales (1875 – 1923)

La Restauración (1875-1923) trae consigo estabilidad política relativa y alternancia bipartidista, pero también un proceso de repliegue aparente de la masonería en la península. Mientras el sistema turnista integra a las élites, las logias dejan de ser, salvo excepciones, el principal instrumento de conspiración y pasan a funcionar sobre todo como redes de sociabilidad política y profesional.
Alejandro Lerroux García.
Imagen: Personajes clave masonería.
La masonería militar no desaparece: se transforma. El foco se desplaza hacia las guarniciones de ultramar y el Protectorado.

En las campañas de Cuba, Filipinas y Marruecos, la presencia de militares masones es apreciable. La investigación sobre masonería colonial muestra que las logias de obediencia española en estos territorios se distanciaron, en general, de talleres independentistas o de obediencias extranjeras.

La logia «Hijos de la Africana», fundada en Melilla en 1922, ejemplifica la función de estas logias norteafricanas: reunir a oficiales y civiles en un entorno bélico para brindarse ayuda mutua, apoyo moral y redes de confianza. El acta de fundación y los estudios posteriores muestran una clara «preeminencia militar» en su composición.

A partir de los expedientes y hojas de servicios de oficiales de logias como «Hijos de la Africana» o talleres similares, puede delinearse un perfil tipo del militar masón de esta etapa:
  • Empleo: predominio de tenientes y capitanes, con presencia también de comandantes y algunos jefes superiores.
  • Armas y cuerpos: transversalidad, con fuerte peso de Infantería (arma más sacrificada en campaña), pero también de Ingenieros y oficiales de la Armada.
  • Experiencia: veteranos con amplia hoja de servicios en campañas coloniales; su pertenencia a logias coexiste con una intensa carrera operacional.
  • Ideología: liberalismo o republicanismo moderado.
El período también presencia profundas tensiones corporativas: conflictos entre oficiales «peninsulares» y «africanistas», el debate sobre los ascensos por méritos de guerra y la crisis del modelo de oficialidad tras el Desastre del 98 y, más tarde, Annual. Las Juntas de Defensa de 1917 cristalizan este malestar corporativo, cuestionando el poder político civil.


El dato relevante para nuestro objeto es que la militancia masónica y el corporativismo militar conviven. Muchos oficiales que participan en Juntas o en redes africanistas son –o han sido– masones, sin que eso implique necesariamente una cohesión política homogénea dentro de la Orden. La fraternidad masónica se superpone a otras identidades (cuerpo, arma, promoción, africanismo) en una compleja red de lealtades cruzadas.

7. Polarización y conflicto: de la Dictadura a la Guerra Civil (1923 – 1939)

Fermín Galán. Biografías y Vidas.
La dictadura de Miguel Primo de Rivera (1923-1930) endurece el clima político y reduce los espacios de participación legal. Muchos oficiales con simpatías liberales o republicanas –a menudo masones– se desplazan hacia la oposición clandestina. En este contexto aparece la Asociación Militar Republicana (AMR), organización semiclandestina de oficiales con ideología heterogénea pero con tendencia republicana, que se convierte en referente de protesta interna.

Entre sus filas y círculos próximos se encuentran militares como Fermín Galán, protagonista de la sublevación de Jaca (1930), cuya ejecución lo convierte en mártir del republicanismo. Diversas fuentes apuntan a la pertenencia masónica de Galán, aunque el dato ha generado debate historiográfico.

La proclamación de la Segunda República (1931) marca el momento de máxima visibilidad e influencia política de la masonería en la historia de España. El nuevo régimen representa, para muchos, la cristalización de ideales masónicos: laicismo moderado, soberanía popular, reforma social y militar. No sorprende que se produzca un auge notable en afiliación y actividad de logias, incluidas aquellas con fuerte presencia de oficiales.
Eleuterio Díaz-Tendero. Imagen Db.
La fundación de la Unión Militar Republicana Antifascista (UMRA) en 1934, impulsada por el capitán Eleuterio Díaz-Tendero junto a otros oficiales de izquierdas, ejemplifica esta identificación entre sectores del Ejército y redes masónicas. UMRA surge como réplica a la derechista Unión Militar Española (UME), y agrupa a oficiales y suboficiales próximos al socialismo y al comunismo; varios de sus dirigentes o simpatizantes tienen vínculos con logias.

Las logias y organizaciones afines desempeñan funciones de:
  • Defensa del régimen republicano desde dentro del estamento militar.
  • Socialización política de oficiales jóvenes en clave republicana y de izquierda.
En este clima de polarización, el diputado José Antonio Cano López en febrero de 1935, denuncia una supuesta «infiltración tentacular» de logias en el Ejército y proporciona listas de generales masones. Entre los nombres mencionados figuran Miguel Cabanellas, Sebastián Pozas, Miguel Núñez de Prado, José Riquelme y José Fernández de Villa-Abrille, entre otros.
La investigación posterior ha demostrado que parte de esa lista era errónea: algunos acusados nunca fueron masones o tenían expedientes negativos en Salamanca.

8. Guerra Civil: lealtades cruzadas y masones

Al estallar la Guerra Civil (1936), la mayoría de los militares masones se mantiene leal a la República. Sin embargo, la realidad es más compleja: existen masones en el bando franquista, como el el general Cabanellas, el coronel de Ingenieros Enrique Adrados Semper o el general Mariano Muñoz Castellanos, cuyas trayectorias muestran cómo la lealtad al «Movimiento Nacional» y la carrera militar pueden, en determinados casos, imponerse a los vínculos fraternales.
General Miguel Cabanellas. Wikipedia

Adrados Semper, iniciado en la logia «Constancia» n.º 16 (Zaragoza), se suma al bando sublevado, manda la 55.ª División y es condecorado por sus servicios. Tras la guerra, el Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo (TERMC) abre contra él el sumario 848/1945, que acaba archivado, probablemente por su brillante hoja de servicios.

Muñoz Castellanos, iniciado en la logia «Danton» n.º 7, participa en operaciones en Marruecos y luego en la Guerra Civil como general del bando nacional; también es investigado por masonería, pero su causa se sobresee.

Estos casos confirman que la masonería militar no fue un bloque monolítico. En momentos críticos, las lealtades políticas, corporativas o personales podían pesar más que la pertenencia a la Orden.

El decreto de septiembre de 1936 declara a la francmasonería «contraria a la ley» y convierte la pertenencia a logias en delito político. Se cierran templos, se incautan archivos y se persigue a los masones, civiles y militares.

En la zona republicana, la masonería es tolerada e incluso protegida en un primer momento, pero la dinámica de guerra y el protagonismo creciente de organizaciones de masas (partidos, sindicatos) reducen su peso real en la toma de decisiones. De manera paradójica, el momento de máximo prestigio simbólico coincide con el principio del fin de la masonería en España.

9. Régimen del General Franco (1939 – 1975).

9.1. El Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo

La victoria del bando Nacional abre una etapa de acoso sistemático contra la masonería. La Ley de Represión de la Masonería y el Comunismo (1940) y la creación del Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo (TERMC) abren más de 64.000 expedientes tramitados hasta su supresión en 1963.
El TERMC considera la mera pertenencia masónica como delito. Impone penas de reclusión, inhabilitación absoluta y separación definitiva del servicio a centenares de militares.

Los expedientes de oficiales masones –incluidos algunos que habían combatido en el bando franquista– documentan un abanico de situaciones: desde fusilamientos y largas condenas hasta archivo de causas por «ignorado paradero» que en realidad encubrían decisiones políticas de salvar carreras valiosas para el régimen.
Se considera que la masonería habría corroído al Ejército y al Estado. La consecuencia es la práctica extinción de la masonería militar: la Orden se ve reducida a la clandestinidad o al exilio, y en el interior de las Fuerzas Armadas cualquier vínculo real o supuesto con logias supone una losa insalvable.

10. Democracia, Fuerzas Armadas actuales y memoria de la masonería militar (1975 – 2024)

Con la muerte de Franco y la Constitución de 1978, la libertad de asociación y conciencia se restablecen. La masonería se reorganiza legalmente en varias obediencias, y se multiplican estudios académicos sobre su historia, incluidos algunos centrados en la relación con el Ejército.

En las Fuerzas Armadas de la democracia no existe prohibición legal de pertenencia a logias, siempre que se respeten los principios de neutralidad política y disciplina.
Su presencia en el estamento militar parece ser testimonial, y no hay indicios de influencia organizativa significativa.


11. Comparación internacional: Francia, Estados Unidos y América Latina

Francia es, junto con Gran Bretaña, una de las matrices de la masonería militar moderna. Las logias de regimiento del ejército napoleónico desempeñan un papel fundamental en la difusión del modelo por Europa y América, incluyendo España, donde «La Reunión Española» se inspira directamente en ese patrón.
En el ejército francés del siglo XIX, la masonería goza de un grado de tolerancia mayor que en España, si bien su papel político se ve también limitado por la consolidación de las instituciones republicanas.

En Estados Unidos, la masonería se integra en la cultura de las élites desde el siglo XVIII. Numerosos padres fundadores y militares de alto rango fueron masones, y la Orden participa en ceremonias simbólicas –como la colocación de la primera piedra del Capitolio– sin ser objeto de grandes campañas represivas. La masonería estadounidense se caracteriza por su pluralismo y por un fuerte énfasis filantrópico, más que conspirativo.

En América Latina la tradición de militares masones es muy marcada: figuras como San Martín, O’Higgins o Miranda participan en logias que combinan sociabilidad, conspiración independentista y redes transnacionales.


12. Conclusiones

La relación entre estamento militar y masonería evoluciona paralelamente a las transformaciones del Estado español:
  • Siglo XVIII: afinidad con ideas ilustradas, en tensión con el absolutismo borbónico.
  • Siglo XIX: identificación con el liberalismo constitucional y protagonismo en conspiraciones y pronunciamientos.
  • Crisis coloniales y Restauración: masonería militar como red de sociabilidad y apoyo patriótico en ultramar.
  • Siglo XX temprano: creciente alianza con el republicanismo y las izquierdas.
Lejos de formar un bloque monolítico, la masonería militar:
  • Agrupa a oficiales con ideologías diversas, desde liberales moderados hasta comunistas, pasando por conservadores ilustrados.
  • Presenta casos de masones en bandos opuestos: realistas e independentistas en América; republicanos y sublevados en 1936.
  • La pertenencia a la Orden es una lealtad más, que puede reforzar o entrar en conflicto con la lealtad al Estado, al cuerpo o a la propia carrera. En muchos casos, la identidad militar terminó imponiéndose cuando la supervivencia institucional o personal estuvo en juego.
Peso real e impacto histórico:
  • El número total de masones españoles fue reducido (cifras máximas por debajo de 10.000), pero la proporción de militares entre ellos fue relativamente alta.
  • Pese a ello, su influencia institucional sobre las decisiones del Ejército fue limitada: la mayor parte de los oficiales masones tuvieron carreras acordes a los patrones de su época, sin ocupar necesariamente posiciones de control «masónico» sobre el estamento.

12. Bibliografía

  • Álvaro Dueñas, Manuel (1999): «El decoro de nuestro aire de familia. Perfil político e ideológico de los presidentes del Tribunal Nacional de Responsabilidades Políticas», Revista de Estudios Políticos, n.º 105.Academia
  • Busquets Bragulat, Julio (1996): «La Asociación Militar Republicana (AMR) y la Unión Militar Republicana Antifascista (UMRA) y su relación con la masonería (1929-36)», en J. A. Ferrer Benimeli (coord.), La masonería en la España del siglo XX, t. II, Zaragoza.Dialnet+1
  • Ferrer Benimeli, José Antonio (1996): La masonería española: La historia en sus textos, Madrid.UNED+1
  • Ferrer Benimeli, José Antonio (1998): «La masonería española y la crisis colonial del 98», Revista del Cabildo de Gran Canaria.revistas.grancanaria.com
  • García-Municio de Lucas, Ezequiel Ignacio (2018): Militares ilustrados, liberales y masones de 1728 a 1936, Oviedo, Masónica.es.asehismi.es+1
  • Morales Ruiz, Juan José (2020): «La Ley de Represión de la Masonería y el Comunismo (1940)», Revista Estudios, Universidad de Costa Rica.SciELO Costa Rica
  • Paz Sánchez, Manuel de (2006): «Masonería española y emancipación colonial», Revista de Indias, CSIC.revistadeindias.revistas.csic.es+1
  • Portilla Contreras, Guillermo (2009): La consagración del Derecho penal de autor en el franquismo: El Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo, Granada, Comares.vLex+1
  • Valín Fernández, Alberto (2004): «La masonería y los militares en la historia de España», Anuario Brigantino, n.º 27.anuariobrigantino.betanzos.net+1
  • Varios autores (UNED): Museo Virtual de Historia de la Masonería (especialmente «La masonería en España (1728-1979)» y los apartados dedicados a logias del norte de África).archivofsierrapambley.wordpress.com+3UNED+3UNED+3

Monografías y obras de síntesis

  • Ferrer Benimeli, José Antonio. La masonería española: la historia en sus textos. Madrid: Istmo, 1996. traperiadeklaus.es+1
  • Ferrer Benimeli, José Antonio (coord.). La masonería en la España del siglo XX. VII Symposium Internacional de Historia de la Masonería Española (Toledo, 17-20 de abril de 1995), 2 vols. Cuenca–Toledo: Universidad de Castilla-La Mancha, 1996. Dialnet+1
  • Ferrer Benimeli, José Antonio (ed.). La masonería española y la crisis colonial del 98. VIII Symposium Internacional de Historia de la Masonería Española (Barcelona, 3-6 de diciembre de 1997). Zaragoza: Centro de Estudios Históricos de la Masonería Española / Universidad de Zaragoza, 1999. Dialnet+2Puz+2
  • García-Municio de Lucas, Ezequiel Ignacio. Militares ilustrados, liberales y masones (de 1728 a 1936). Madrid: Masónica.es, Ediciones del Arte Real, 1.ª ed. 2018 (reed. 2023). Uniliber+2Librería Canaima+2
  • Morales Ruiz, Juan José. La publicación de la Ley de represión de la masonería en la prensa de la España de postguerra (1940). Zaragoza: Diputación de Zaragoza, Institución «Fernando el Católico», 1992. revistas.ucr.ac.cr+1
  • Morales Ruiz, Juan José. Palabras asesinas: el discurso antimasónico en la Guerra Civil española. Oviedo: Masónica.es, 2017. revistas.ucr.ac.cr+1
  • Morales Ruiz, Juan José. Franco y la masonería. Un terrible enemigo que no se rinde jamás. Oviedo: Masónica.es, 2022. revistas.ucr.ac.cr+1
  • Portilla Contreras, Guillermo. La consagración del derecho penal de autor durante el franquismo: el Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo. Granada: Comares, 2009 (ed. comercial 2010). Dialnet+2Marcial Pons+2
  • Álvaro Dueñas, Manuel. Por ministerio de la ley y voluntad del Caudillo: la jurisdicción especial de responsabilidades políticas (1939–1945). Madrid: Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2006. Wikipedia

Artículos en revistas científicas

  • Paz Sánchez, Manuel de. «Masonería española y emancipación colonial». Revista de Indias 66, n.º 238 (2006), pp. 737-760. revistadeindias.revistas.csic.es+2Dialnet+2
  • Valín Fernández, Alberto J. «Botas y espadas en la secreta sociedad de la escuadra y el compás: la masonería y los militares en la historia de España». Anuario Brigantino 27 (2004), pp. 223-242. anuariobrigantino.betanzos.net+2Dialnet+2
  • Morales Ruiz, Juan José. «La Ley de Represión de la Masonería y el Comunismo (1 de marzo de 1940). Un estudio de algunos aspectos histórico-jurídicos». Revista de Estudios Históricos de la Masonería Latinoamericana y Caribeña (REHMLAC+) 12, n.º 1-2 (2020), pp. 160-197. SciELO Costa Rica+1
  • Feron, Delphine G. «Francisco Ferrari Billoch y la represión antimasónica en la España de posguerra». Pasado y Memoria. Revista de Historia Contemporánea 27 (2023). Pasado y Memoria+1
  • Álvaro Dueñas, Manuel. «El decoro de nuestro aire de familia. Perfil político e ideológico de los presidentes del Tribunal Nacional de Responsabilidades Políticas». Revista de Estudios Políticos 105 (1999). CEPC+2Recyt+2

Capítulos en obras colectivas y actas

  • Busquets Bragulat, Julio. «La Asociación Militar Republicana (AMR) y la Unión Militar Republicana Antifascista (UMRA) y su relación con la masonería (1929-36)». En: José Antonio Ferrer Benimeli (coord.), La masonería en la España del siglo XX, vol. 2, pp. 871-890. Toledo: Universidad de Castilla-La Mancha, 1996. Dialnet+2Dialnet+2
  • Ferrer Benimeli, José Antonio. «La masonería española y la crisis colonial del 98». En: La masonería española y la crisis colonial del 98. VIII Symposium Internacional de Historia de la Masonería Española. Zaragoza: CEHME / Universidad de Zaragoza, 1999 (y versión ponencia, Casa de Colón, Las Palmas, 1998). revistas.grancanaria.com+2revistas.grancanaria.com+2

Recursos académicos específicos y estudios de caso

  • «La masonería en Ciudad Rodrigo: Logia “La Mirobrigense”» (estudio histórico local disponible en Academia.edu), utilizado puntualmente para confirmar datos de contexto y referencias cruzadas a Valín Fernández. Academia

Dead of Night (1945)

E s una antología británica de horror producida por Ealing Studios, un estudio conocido principalmente por sus comedias, pero que aquí incur...